Además de lograr la autosuficiencia energética, se espera poder verter electricidad a la red en un futuro próximo
Las Palmas de Gran Canaria, 8 de julio de 2021.- Grupo Capisa ha instalado en sus fábricas de CAPISA y Silos Canarios un sistema de paneles solares con vista no sólo a lograr la autosuficiencia energética, sino también a compensar la huella de carbono que, como industria, pueda generar en sus procesos. Con este proyecto -que ya es una realidad- la potencia nominal generada es de 90 kW (2x25000W y 2x20000W), lo que al año son 155.40 MWh. El ahorro anual energético es de 15,76 tep/año (toneladas equivalentes de petróleo). Así se evita verter a la atmósfera 95,5 toneladas de CO2.
La superficie total que ocupa la instalación fotovoltaica es de 2.620 m2 sobre las cubiertas de ambos edificios. Se le ha dado una inclinación de 15o, mediante 320 módulos de 310 W cada uno. En total suman 99,20 kWp.
El director general de Grupo Capisa, Samuel Marrero, aclaró que esta instalación fotovoltaica “está destinada a conectarse al cuadro general de Distribución de Baja Tensión (para el autoconsumo) de las fábricas, por lo que aún no generamos excedentes”, aunque según adelantó “el objetivo es no sólo la autosuficiencia y la compensación de la huella de carbono, sino en un futuro beneficiar a la red volcando lo que no consumamos; una electricidad que ha sido obtenido con una fuente limpia e inagotable como es el sol”, explicó.
Cambio de filosofía
Marrero señaló que, en su opinión “este proyecto tiene un valor que va más allá de la propia instalación, que ya nos parece un cambio de filosofía significativo. Es una mejor estrategia empresarial: hemos pasado de consumir hace unos años la energía proveniente de la red eléctrica, que se produce quemando combustibles fósiles en su mayor parte, a generar la energía limpia que consumimos. Cuando seamos capaces de producir más de lo que gastamos y cargarlo en la red, habremos cerrado ese círculo”, dijo. Ya, en este momento, este programa equivale, en términos emisiones a la atmósfera, a plantar unos 16 mil pinos canarios al año.
Estas instalaciones fotovoltaicas están incluidas en el Plan de Fomento de las Energías Renovables y contribuyen a cumplir los acuerdos de Kyoto, en lo tocante al aumento del uso de las energías renovables y la reducción significativa de las emisiones de CO2. Se obtienen así mejoras tangibles en medio ambiente y se disminuye la dependencia de combustibles fósiles.
Las instalaciones fotovoltaicas de Grupo Capisa son de una alta fiabilidad y con una disponibilidad operativa cercana al 100%. Grupo Capisa evita emitir cada año a la atmósfera 95 toneladas y media de CO2
Economía circular
El director general de Grupo Capisa quiso explicar también que “este proyecto de producción fotovoltaica no es una acción aislada. A través de otros programas, como la implantación de la ISO 14001 de gestión medioambiental, o el proyecto aRbol, hemos planificado una estrategia de economía circular, por la que nuestras industrias trabajan para reciclar todo los materiales excedentes, limitando al máximo los residuos no recuperables y buscar ser lo más eficientes posibles también en otros recursos, como por ejemplo el agua”, explicó.
Desde 2014, en Grupo Capisa existe un equipo humano perteneciente a la Dirección de Calidad, que analiza las posibilidades de ahorro y racionalización de recursos; reducción de residuos no reciclables, o gestión adecuada el agua y los combustibles, así como los materiales consumibles y desechables. Se informa y forma al personal, se incluye a empresas de gestión de residuos y se siguen los protocolos de las normativas de calidad.
La normativa de calidad implantada exige que, por ejemplo, se evalúe el consumo de combustible del parque de vehículos de la empresa. Lo mismo ocurre con la flota de camiones de reparto (que pertenecen a una empresa externa). Se estudian sus rutas de reparto para ganar en eficiencia en tiempo y consumo.
Grupo Capisa evita emitir cada año a la atmósfera 95 toneladas y media de CO2