El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, manifestó hoy en el Parlamento su intención de disminuir progresivamente las ayudas y exenciones al consumo directo destinadas a los productos ganaderos importados tanto de la Unión Europea como de terceros países, con el fin de situar a los productores canarios en igualdad de condiciones que sus competidores.
En Comisión parlamentaria, Quintero señaló que el Departamento apuesta por ajustar los balances del Régimen Específico de Abastecimiento (REA) a las cantidades estrictamente necesarias para el suministro, y reducir los balances en la misma medida que aumenta la producción local.
«Soy consciente de que hay que buscar el equilibrio adecuado de los niveles de ayuda, de manera que la importación de productos ganaderos ya procesados –que no generan valor añadido en Canarias- no obstaculicen el desarrollo de dos sectores: el ganadero y la industria agroalimentaria», dijo el responsable del Área.
La ganadería en Canarias compite con productos procedentes de terceros países que son importados sin arancel; y con los procedentes de la Unión Europea, que ya se han beneficiado de las ayudas establecidas en la PAC, más de 50.000 millones de euros de los que España recibe 6.800. Esto hace que la ganadería canaria se vea doblemente afectada por las importaciones, por lo que es necesario la implantación de medidas que palíen la situación.
«Tenemos que producir más en nuestra tierra y debemos impulsar al máximo nuestras posibilidades, medidas tomadas en la pasada Legislatura, insisto, como la de aumentar la ayuda a la importación a los cereales destinados a la alimentación animal hasta cubrir los 100 euros por toneladas ha dado muy buenos resultados», comentó el consejero.
Esta cobertura permite a los ganaderos de las Islas ser más competitivos al acceder a estos insumos, que representan aproximadamente un 75% de los costes de producción de una explotación ganadera, al mismo precio que lo hacen los ganaderos continentales.
Durante la sesión, el titular del Área explicó que para este año 2015 no hay posibilidades de realizar cambios e insistió en que esa línea es en la que tiene que seguir trabajando el Departamento autonómico para que los productores cárnicos cárnicos compitan en el mercado en igualdad de condiciones con el producto que viene de fuera.
El consejero destacó también que no puede existir una ayuda directa a los competidores del sector. «Hay que modularlo de la forma más adecuada y creo que debe ser según la capacidad que tengamos de crecimiento, nuestro crecimiento determinará el decrecimiento de la ayuda a la importación», añadió.
«Como ya comenté en el Pleno de la Cámara, ya en la pasada legislatura se realizaron ajustes para paliar las dificultades que atraviesa la ganadería en Canarias, y creo que debemos seguir dando esos pasos para lograr un nivel de autoabastecimiento razonable», agregó.