La situación agónica del sector ganadero de Fuerteventura se resume en varias cifras y en una única demanda ante los gobiernos de Canarias y España. La reivindicación es un reparto más justo y equilibrado de los fondos europeos del POSEI, cuyo 70% se destina al sector platanero y apenas el 20% a distribuir entre el tomate y la ganadería. En cuanto a las cifras, cada una resulta más lamentable que la anterior: en cuatro años, 300 de las 562 explotaciones ganaderas de la Isla han cerrado (un 53,5%) y el censo caprino ha caído en picado de 132.000 a 79.000 cabezas, de las cuales solo 50.000 son primables. El último dato es el de la deuda atrasada del POSEI: ocho millones de euros no han cobrado los ganaderos majoreros, la mitad de la deuda ganadera de Canarias.
La plataforma Ganaderos de Fuerteventura, que aglutina a las 15 cooperativas y asociaciones de la Isla, esto es el cien por cien del sector primario, sacó ayer a la luz estas cifras de una caída de la que todos hablan pero nadie soluciona. «Nos va a costar bastante la vida y no podemos permitir que esto se venga abajo. Más de 200 explotaciones ganaderas ya se han quedado en el camino», resumió Bernardo Peña, uno de sus representantes.
Antes del 31 de julio. Ante esta perspectiva de desaparición del sector, la plataforma plantea una reunión de urgencia para hoy, viernes, a las 20.00 horas, con todos los parlamentarios regionales por Fuerteventura en la fundación Manuel Velázquez Cabrera, en Tiscamanita. Además, solicitarán el apoyo del Cabildo y los ayuntamientos.
Con el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, también piden reunirse y que sea antes del 31 de julio, que es cuando termina el plazo para el Ejecutivo autónomo presente su propuesta de distribución de los dineros del POSEI. «Al sector ganadero nunca nos han consultado y así no podemos seguir, por eso pedimos un cambio en el reparto que no beneficie tanto a los productores plataneros». Y es que, subrayaron una vez más, «esta en juego la subsistencia de la ganadería en Fuerteventura».